La Ciencia Espiritual Pura
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espiritualidad y asegurar la destrucción de los infieles. Eres el No nacido, pero desciendes cada era para cumplir Tu misión. Oh, Señor, igual que en el cielo se diseñan numerosas formas para después disiparse, Tú apareces y desapareces de este mundo bajo múltiples formas que son eternas. Entonces, ¿quién puede comprender Tus Distracciones o el misterio de Tus Apariciones y Desapariciones? Nuestra única preocupación debe ser, pues, glorificar Tu grandeza suprema».

El Señor Krishna precisa: «Aprended de Mis labios que son solamente Mis energías las que intervienen en todas partes. Coged una maceta de tierra: no tenéis más que una mezcla de tierra, agua, fuego, aire y éter. No importa que la maceta sea nueva, vieja o esté rota, siempre está compuesta por los mismos elementos. Cuando se crea, la maceta es solo una combinación de tierra, agua, fuego, aire y éter; durante toda su existencia, sus componentes siguen siendo los mismos y cuando sea destruida, aniquilada, esos componentes se conservarán en diferentes sectores de la energía material. Según el mismo orden de ideas, durante la creación del cosmos, mientras se está manifestando, así como después de su destrucción, es Mi energía, siempre la misma, que adquiere diferentes aspectos. Y como Mi energía no está separada de Mi Persona, hay que concluir que Yo existo en todas las cosas».

«Paralelamente, el cuerpo de un ser vivo es solo una mezcla de cinco elementos no sutiles y el ser propio encarnado en esta condición material representa un fragmento de Mi Persona. Si el alma se encuentra así encarcelada es porque alimenta una concepción equivocada de su identidad y se considera la beneficiaria suprema. Es ese falso ego del ser vivo el que lo obliga a conocer la encarcelación en la existencia material. Como Verdad Suprema y Absoluta, Me encuentro personalmente más allá del ser vivo y de su envoltura material. Las dos energías, material y espiritual, actúan en Mi autoridad soberana. Mis queridos gopis, os pido que no os aflijáis tanto y que tratéis de verlo todo con filosofía. A partir de entonces, entenderéis que estáis siempre Conmigo y que no hay ningún motivo para lamentarse en la separación de nuestros cuerpos».

Krishna, que quiere decir «El más fascinante», es el nombre más poderoso de Dios, el Padre Eterno, la persona Suprema. Es el verdadero Dios, el único, no hay otro. Es al que Jesús llamaba Padre. Él les dijo a sus discípulos:

«Voy a la casa de mi Padre y vuestro Padre, a casa de mi Dios y vuestro Dios».

Krishna es el derivado de la palabra griega Kristos, que a su vez se convierte en Cristo. Cuando en India los devotos invocan a Krishna, pronuncian a menudo su nombre Krista que en sánscrito quiere decir «atractivo». Ya sea que nos dirijamos a Dios con los nombres de Cristo, Kristos, Krista o Krishna, nuestra adoración va siempre a la misma Persona Suprema, infinitamente fascinante.

El Señor Krishna es la fuente original de todo lo que existe, de él todo emana. Nadie lo iguala ni lo supera. Él es la verdad absoluta y el Padre Eterno Persona Divina. Es el ser Primordial, Original y Absoluto. El objetivo de la existencia es conocerlo.

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