Entonces aparecieron las dos manos de la forma universal del Señor, y con ellas el poder de tomar y soltar objetos; Luego fue Indra. Luego vinieron las piernas, y con ellas la capacidad de moverse; Entonces apareció Sri Visnu.
El ser celestial que gobierna las manos es Indra, y el que dirige el movimiento es Visnu, la Personalidad Suprema, que apareció con la manifestación de las piernas de la forma universal.
Entonces se manifestaron las venas de la forma universal, y con ellas los glóbulos rojos, o sangre. Les sucedieron los ríos (los seres celestiales que gobiernan las venas), luego el abdomen de la forma universal.
Luego vinieron las sensaciones de hambre y sed, seguidas por los océanos. Entonces apareció el corazón de la forma universal, y después de él la mente.
Después de la mente vino la Luna, luego la inteligencia y luego Brahma. Luego apareció el ego falso, Siva, la conciencia y finalmente el ser celestial que lo gobierna.
Cuando los seres celestiales y las deidades que gobiernan los diversos sentidos se manifestaron así, quisieron despertar la fuente de su existencia. Pero al no poder hacerlo, regresaron uno tras otro al cuerpo de la forma universal, para despertarlo.
El ser celestial de fuego entró en su boca con el órgano del habla, pero la forma universal no despertó. Entonces el ser celestial del viento entró en su nariz con el sentido del olfato, pero la forma universal todavía se negaba a despertar.
Los seres celestiales que eran dueños de la piel, las hierbas y las plantas aromáticas entraron en la piel de la forma universal con los pelos que cubrían el cuerpo, pero el Ser cósmico aún no despertaba. El ser celestial del agua entró en su órgano reproductor con la facultad de procrear, sin lograr tampoco despertarlo.
El ser celestial de la muerte entró en su ano con el poder de evacuar, pero esto tampoco logró estimular la forma universal. Entonces el ser celestial Indra entró en Sus manos con el poder de tomar y soltar objetos, pero aún así no se levantó.
Sri Visnu entró en Sus pies con la facultad de movimiento, pero en vano. Los ríos entraron en sus vasos sanguíneos con la sangre y su capacidad de circular, pero el Ser Cósmico aún no se movía.
El océano entró en su vientre con hambre y sed, pero el Ser cósmico se negó incluso entonces a elevarse. Entonces el ser celestial de la Luna entró en Su corazón con la mente, pero todavía en vano.
Brahma también penetró en Su corazón con inteligencia pero sin lograr convencer más al Ser cósmico a elevarse. Y el propio Rudra entró en Su corazón con el ego falso, pero sin más éxito.