En cuanto a sus ingresos, el devoto debe estar satisfecho con lo que pueda ganar sin gran dificultad. Tampoco debe comer más de lo necesario. Debe vivir en un lugar apartado y ser siempre considerado, sereno, benévolo, compasivo y consciente de su verdadero yo.

Es necesario perfeccionar la visión a través del conocimiento de la materia y del espíritu, y evitar identificarse vanamente con el cuerpo a riesgo de ser atraído por afinidades materiales.

Uno debe establecerse en el nivel espiritual, más allá de los diferentes niveles de conciencia material, y permanecer libre de cualquier otra concepción de la existencia. Para liberarse del ego falso, uno debe aprender a ver el propio ser como ve el sol en el cielo.

El alma liberada realiza al Señor Supremo Absoluto, que trasciende todo y se manifiesta incluso dentro del ego falso, en forma reflejada. Representa el apoyo de la causa material y penetra en todas las cosas. Es absoluto, único y constituye los ojos de la energía ilusoria.

Uno puede percibir la presencia del Señor Supremo tal como uno percibe el sol, primero a través de su imagen en el agua, luego a través de su reflejo en la pared de una habitación, el sol mismo nunca abandona el firmamento.

El alma realizada se refleja así en las tres formas del ego falso, luego en el cuerpo, los sentidos y la mente.

Aunque el devoto parezca estar totalmente fundido en los cinco elementos materiales, los objetos de placer, los sentidos, la mente material y la inteligencia, debe considerarse despierto y libre del ego falso.

El ser distinto puede percibir muy claramente que existe como observador real, pero debido a la desaparición del ego en el estado de sueño profundo, se cree perdido, tal como un hombre desesperado por haber perdido su fortuna se considera aniquilado.

Cuando, a través de una comprensión madura de las cosas, el ser llega a darse cuenta de su propia identidad, la situación a la que se ha sometido bajo la influencia del ego falso se hace manifiesta a sus ojos.

Es posible alcanzar la liberación si uno realiza servicio devocional con seriedad y escucha así durante mucho tiempo las expresiones concernientes a Mí o que emanan de Mí. Quien así cumpla con sus deberes prescritos, no sufrirá repercusiones por ninguna de sus acciones y se encontrará libre de toda contaminación material.

Este servicio devocional debe realizarse enérgicamente, con conocimiento perfecto y con visión espiritual. Uno debe renunciar firmemente y practicar la austeridad y el yoga para establecerse firmemente en la absorción interna.