la importancia de este método directo. Con la mente así purificada, espiritualizada, uno debe comprometerse sin demora en el servicio de amor absoluto ofrecido al Señor a través de las diversas actividades devocionales como escuchar, cantar, etc. Incluso el hombre con una mente turbulenta tendrá asegurado el progreso si toma este camino bajo la dirección de un guía cualificado. Meditemos entonces en las diversas partes del Cuerpo de Visnu (Krishna), una tras otra, sin perder la visión de su forma completa. De este modo, nuestra mente se desprenderá de los objetos sensoriales. No llevemos nuestros pensamientos a ninguna otra parte, porque el Señor Supremo, Visnu, encarna la Verdad Suprema; sólo en Él la mente encontrará la unión perfecta. La mente está constantemente perturbada por la pasión y engañada por la ignorancia. Pero este mal puede ser remediado: conectando todo con Visnu (Krishna), las impurezas que surgen de las influencias materiales se disuelven, y se puede encontrar la paz interior.
La rueda de la existencia material.
La mente material cubre el alma, atrayéndola de una forma de vida a otra. Esto se llama la rueda de la existencia material.
Las actividades de la mente bajo la influencia de la naturaleza material son la causa de la felicidad y la infelicidad en este mundo. Cegada por la ilusión, el alma persigue eternamente su existencia condicionada por la materia bajo diferentes nombres. Los que se encuentran en esta situación se llaman seres eternamente condicionados. En resumen, la mente es el origen de la existencia condicionada. Por eso, la práctica de la unión con Dios en su conjunto tiene como objetivo asegurar el dominio sobre la mente y los sentidos. Una vez que se domina la mente, se dominan automáticamente los sentidos, y el alma se salva de las consecuencias de la acción virtuosa o impía. Si uno pone la mente a los pies del Señor Krishna, los sentidos se emplearán automáticamente en Su servicio; y cuando absorbe su mente y sus sentidos en el servicio del amor y la devoción a Dios, el ser individual se vuelve naturalmente consciente de Él. Aquel que siempre medita en Krishna se convierte en un perfecto espiritualista trascendentalista.
La mente está condicionada por la naturaleza material y, debido a su gran poder, cubre el alma individual y la sumerge en las olas de la existencia material. Cuando la mente y los sentidos se purifican, toda la existencia se purifica, y uno se libera de todas las designaciones materiales. Uno deja de considerarse un ser humano, un ser celestial, un animal, un cristiano, un musulmán, un africano o un europeo. Cuando los sentidos y la mente se purifican y uno se absorbe completamente en el servicio de Krishna, uno puede liberarse y regresar a Dios, a su morada original en el reino del Señor Supremo.