denota a la Persona Soberana como la causa de todas las causas. El mundo de los fenómenos, el cosmos material, se basa en la existencia del noúmeno, lo comprensible, la realidad inteligible. Del mismo modo, todo existe en virtud del poder del Señor Supremo, aunque, debido a nuestra ignorancia, no lo percibimos en todo.

Puede decirse que la multitud de formas creadas tiene su origen en el propio planeta Tierra. Sin embargo, aunque el universo pueda parecer temporalmente una verdad tangible, en última instancia no tiene una existencia real. La Tierra se creó originalmente como resultado de la combinación de partículas atómicas, pero estas partículas son en sí mismas efímeras. De hecho, en contra de lo que afirman algunos filósofos, el átomo no es el fundamento del universo, y sería un error creer que las múltiples y variadas formas que vemos en el universo material son el resultado de simples yuxtaposiciones o combinaciones de átomos. Los defensores de la teoría atómica creen que todo lo que existe en el mundo procede de una determinada combinación de protones y electrones dentro de los átomos. Sin embargo, los científicos no han podido descubrir el origen de la existencia de los propios átomos. Por tanto, no podemos aceptar la teoría de que el átomo es el fundamento del universo. Tal teoría es propuesta por hombres sin inteligencia: la verdadera inteligencia nos permite comprender que es el Señor Supremo quien sirve de verdadero fundamento de la manifestación cósmica.

El Señor Krishna es la causa original de toda la creación, Él es la primera causa. Él es la Causa de todas las causas, el origen de los átomos y de la energía material. Por lo tanto, la causa fundamental es Dios, la Persona Suprema, y sólo los seres ignorantes tratan de buscar otras causas proponiendo diversas teorías. Las diversas manifestaciones que se encuentran en este mundo no son más que creaciones de la naturaleza material realizadas en diversas circunstancias. Las obras de la naturaleza material se consideran a veces como invenciones de la ciencia; así, reivindicamos la creación y negamos la existencia de Dios. Cubierto por la energía de la ilusión, el ser encarnado pretende atribuirse el mérito de las diversas creaciones que le rodean en este mundo. Pero en realidad, todas estas manifestaciones son creadas automáticamente por la fuerza de la energía material puesta en movimiento por el poder del Señor Soberano. Por lo tanto, es la Persona Suprema la que es la causa raíz. De hecho, la raíz de todo lo que existe es Dios, pero en su ignorancia la gente cree que la materia es el origen de todo.

El asunto se considera en el plano externo, o efímero, pero de hecho la verdad no está ahí. El verdadero protector y refugio de todos los seres es el Ser Espiritual Supremo, Krishna, Dios. El verdadero protector es la naturaleza material, pero Krishna es su Señor y Maestro; Él es el gobernante de todo lo que existe. El Señor Supremo lo gobierna todo, tanto externa como internamente. Es el creador de la función de las palabras y de lo que expresan todos los sonidos. Krishna, Dios, es el fundamento de toda la creación, todo descansa en Él. Todas las galaxias se basan en el resplandor que emana del cuerpo del Señor, y todos los planetas dependen de la