Krishna, Dios, la Persona Suprema no puede ser vista por nadie.
Verdaderamente, es debido a Su poder interno que Krishna permanece velado, y no puede ser visto por nadie. Sólo el alma a la que Él se revela puede verlo y contemplar así su magnífica forma. Sólo el alma sometida a Dios puede conocer verdaderamente la Verdad Absoluta.
El secreto de los secretos es entregarse a Krishna y servirle con amor y devoción. Para los espiritualistas que están constantemente comprometidos con la conciencia de Krishna, en el servicio devocional al Señor, sus ojos espirituales se abren, y Krishna se les revela.
Tal revelación no está disponible ni siquiera para los seres celestiales, los habitantes de los planetas celestiales, a quienes les resulta difícil conocer a Krishna. Los más evolucionados de entre ellos todavía aspiran a verle en su forma sublime, original, personal y más hermosa, su forma de dos brazos, todo conocimiento, dicha y eternidad.
Es extremadamente difícil ver la forma universal de Krishna, un favor que no se concede a todo el mundo, pero aún mayor es la dificultad de conocer la forma personal de dos brazos.
Bienaventurados los que observan y aplican los principios regulativos, que permanecen fieles al vegetarianismo espiritual y no comen carne, pescado ni huevos, porque están libres de pecado y caminan por el camino puro. Que se rindan a Krishna, le sirvan con amor y devoción, y tarareen el canto de los Santos Nombres de Krishna, y el Señor se les revelará.
El Señor Krishna dice: Sólo sirviéndome con amor y devoción indivisibles puede uno conocerme tal como soy, e igualmente en verdad, verme. Así, y sólo así, se puede penetrar en el misterio de mi Persona.