El servicio amoroso y devoto que debemos ofrecer a Krishna, la Suprema Personalidad de Dios, a quien el Señor Rishabhadeva enseña y nos pide que adoptemos, sigamos y practiquemos, es el único camino puro a través del cual todas nuestras desgracias y sufrimientos desaparecerán, pero sobre todo, es solo a través de este camino que podremos entrar al reino de Dios, acercarnos a Krishna, la Suprema Personalidad, verlo cara a cara y permanecer con Él por la eternidad.

El Señor Rishabhadeva nos dice:

Queridos hijos míos, de todos los seres que han asumido cuerpos materiales en este mundo, aquellos a quienes se les ha concedido una forma humana no deberían trabajar día y noche con el único propósito del placer de los sentidos, al cual pueden acceder incluso los perros y los cerdos que se alimentan de excrementos. Más bien, deben practicar penitencia y austeridad con vistas a alcanzar el nivel divino del servicio devocional.

A través de esta práctica, el corazón se purifica y se descubre una existencia eterna y dichosa, que trasciende la felicidad material y dura para siempre.

El camino hacia la liberación sólo puede alcanzarse sirviendo a seres espiritualmente avanzados, ya sean impersonalistas (aquellos que creen que Dios no tiene cuerpo espiritual y es sólo Energía Espiritual Pura) o devotos (seres santos, fieles servidores de Dios). Ya sea que uno desee fusionarse con la existencia del Señor o vivir en Su compañía, uno debe servir a las grandes almas.

En cuanto a aquellos para quienes este camino no tiene interés, que buscan la compañía de hombres enamorados de mujeres y los placeres carnales, el camino al infierno está abierto de par en par para ellos.

Las grandes almas, por el contrario, gozan de un equilibrio perfecto y no hacen diferencias entre un ser vivo y otro. Viven en la mayor serenidad y se sumergen enteramente en el servicio devocional. La ira les es ajena y trabajan por el bien de todos. Su conducta no es en ningún sentido reprensible. A estas personas se les llama grandes almas.

A las personas que quieren revivir su conciencia de Krishna y aumentar su amor por Dios no les gusta hacer nada que no esté relacionado con Krishna. No buscan mezclarse con todos aquellos que sólo se preocupan de mantener su cuerpo, comer, dormir, unirse sexualmente y defenderse. Aunque son cabezas de familia, no tienen ningún apego a su hogar. Ya no tienen nada más para sus esposas, hijos, amigos o posesiones materiales. Al mismo tiempo, no permanecen indiferentes al cumplimiento de sus deberes, sino que se contentan con recolectar el dinero necesario para sobrevivir.

Cuando alguien considera la complacencia de los sentidos como el objetivo de la vida, se involucra tanto en la vida material que se vuelve loco y se entrega a todo tipo de actividades pecaminosas. Él no sabe que es debido a sus malas acciones pasadas que ya ha recibido un cuerpo material, el cual, a pesar de su naturaleza transitoria, es la causa de su sufrimiento.