E incluso si crees que el alma es incesantemente absorbida por el nacimiento y la muerte (sujeta al ciclo de repetidas reencarnaciones), no tienes motivos para afligirte.
La muerte es segura para los que nacen, y el nacimiento seguro para los que mueren. Ya que debes cumplir con tu deber, no debes sentir lástima por ti mismo.
Algunos ven el alma, y es una maravilla asombrosa para ellos. Así también otros hablan de ello y aún otros lo oyen. Sin embargo, hay algunos que, incluso después de escucharlo, no pueden concebirlo.
El (el alma) que se sienta en el cuerpo es eterno, no puede ser asesinado. Así que no tienes que llorar a nadie.
En verdad, la ignorancia de los datos relativos a Dios tal como es realmente, a la verdad existencial y al conocimiento sublime revelado por el Señor Supremo, es causa de sufrimiento, de esclavitud, de extravío y de perdición del hombre. La angustia nace de la ignorancia. Es a través de la ignorancia que las personas cometen un número considerable de actos maliciosos y se enredan en la materia, en el encarcelamiento corporal, y no saben cómo ponerle fin.
Es por eso que los seres iluminados por el verdadero conocimiento espiritual, superior al conocimiento material, y revelado por Krisna, Dios, la Persona Suprema, automáticamente se vuelven buenos.
El Señor Krishna, Dios, dice: «Como el fuego ardiente que convierte la madera en cenizas, el fuego del conocimiento reduce a cenizas todas las consecuencias de las acciones materiales».
El conocimiento contenido en el verdadero conocimiento espiritual actúa como un fuego, a través del cual podemos eliminar, destruir o reducir a cenizas todas las acciones pecaminosas y maliciosas cometidas. Es por esto que los seres humanos necesitan ser educados.
Nacidos ignorantes, se requiere educación espiritual para disipar su ignorancia. Nacidos en la ilusión de la concepción corporal de la existencia, las personas se comportan como animales que tienen solo cuatro actividades, comer, dormir, aparearse y defenderse. Por lo tanto, es necesario impartirles educación espiritual, para que entiendan que no son el cuerpo material, sino en realidad un alma espiritual eterna. Por lo tanto, se comportarán de manera diferente.