Logos 454
En realidad, el «sueño americano» es un señuelo, un obstáculo para el desarrollo de la espiritualidad y la realización espiritual.
Todos los que rechazan a Dios y tienen una concepción corpórea de la existencia deben pasar por el ciclo de renacimiento y muerte repetidamente. Cuando un ciego quiere dirigir o guiar a los demás, todos acabarán cayendo en un precipicio.
Esto es exactamente lo que está ocurriendo ahora. Hay muchos líderes ciegos e ignorantes en todo el mundo que deciden guiar a las masas humanas que son tan ciegas e ignorantes como ellos. Como todos tienen una concepción corporal de la existencia con el placer de los sentidos como base, sufrirán incesantemente, vida tras vida. En estas condiciones no puede haber ni paz ni prosperidad en la tierra, sino sólo violencia y guerra.
No nos dejemos engañar por las ilusiones y tomemos la decisión correcta.
Muchas personas se dejan llevar por los materialistas empedernidos que les ofrecen el «sueño americano», una existencia basada en los múltiples placeres de los sentidos, la búsqueda desenfrenada de la riqueza y el poder, y el gusto inmoderado por los honores, pero que es efímera, en la que no se puede eliminar el sufrimiento, y cuyo final es la muerte.
En realidad, el sueño americano es un freno para el desarrollo de la espiritualidad y la realización espiritual. Es un sueño que no conduce a la luz, sino a la oscuridad de la ignorancia y la perdición.
Obliga al ser espiritual encarnado a someterse sin cesar a la influencia de la energía de la ilusión, a los atributos de la naturaleza material hasta el punto de verse condicionado por ella, y a convertirse en un esclavo de sus sentidos, de su mente y de la materia. A partir de ese momento, se convierte en prisionero de su cuerpo material y se ve obligado a sufrir el ciclo de renacimientos y muertes continuamente, en un cuerpo cuya naturaleza desconoce, porque está en función de sus actos culpables o inocentes.
Ay de todos los que sirven a la energía de la ilusión que es afín a Satanás, porque serán mantenidos en la oscuridad de la ignorancia, y conocerán los tormentos del infierno.