Es imposible alcanzar la verdadera inmortalidad sin entrar en contacto directo con Dios, la Persona Suprema. Dado que permite este contacto, el servicio devocional corresponde a la verdadera inmortalidad y ciertamente conduce a Dios. Es en su forma de Visnu que Krishna, el Señor Supremo original, desempeña su papel de apoyo o destructivo. El Señor Visnu es una emanación completa de Krishna, y es también a través de este aspecto de Su Persona que el Señor manifiesta Su omnipresencia.
A diferencia de todos los demás seres, el Señor Krishna trasciende los límites del tiempo y el espacio. Su omnipresencia no está limitada por el tiempo o el espacio. Es el protector de los virtuosos. Toda alma que se somete a Él, el Ser Supremo, es virtuosa, y esta sumisión le hace ganar la protección absoluta del Señor en todas las circunstancias. Hay que añadir que Su protección también se extiende indirectamente a los no virtuosos, cuando endereza sus extravíos mediante el yugo de Su energía externa.
El Señor Supremo, Visnu, la emanación completa de Krishna, está presente en cada galaxia en la forma de Garbhodakasayi Visnu y Ksirodakasayi Visnu. Este último tiene su propio planeta en el extremo norte de la galaxia. Allí se encuentra un gran océano de leche, donde vive el Señor, acostado en el lecho formado para Él por Ananta, la emanación de Baladeva, la primera emanación completa de Krishna. Todas las galaxias son binarias, es decir, están compuestas por materia densa y materia etérea, y es en este espacio etéreo donde se encuentra el océano de leche.
Más allá de la galaxia y de las siete capas de materia que la cubren, completamente fuera de nuestra visión, está el océano causal, el espacio intergaláctico que constituye el «vacío» del cosmos material en sus límites globales, en el que flotan todas las galaxias, como globos en forma de huevo. Luego, más allá del océano causal, se encuentra la extensión ilimitada del mundo espiritual, generalmente conocida como el resplandor que emana del cuerpo espiritual y absoluto de Krishna. Dentro de este resplandor hay innumerables planetas espirituales, conocidos como los Vaikunthalokas, cada uno de los cuales excede en tamaño a la mayor de las galaxias materiales. En cada uno de estos planetas viven innumerables seres a la imagen exacta del Señor Visnu, que son llamados servidores directos del Señor. Viven felizmente en estos planetas, lejos de todo sufrimiento, y en perpetua juventud, disfrutando de una existencia de perfecta dicha y conocimiento, sin temor al nacimiento, la enfermedad, la vejez y la muerte, que allí no existen, ni a la influencia del tiempo eterno, que brilla por su ausencia.
El Señor desea que todos los seres humanos, sin excepción, adopten el camino correcto de la realización espiritual, y así accedan a Su reino divino, eterno y absoluto. El Señor Krishna no tiene otro deseo que ver a las almas sufrientes regresar a su morada original y recuperar su lugar con Él, lejos de las tres fuentes de sufrimiento material: