Señor trascendental. Todo esto, junto con el conocimiento de sus características individuales y la convicción constante derivada de ellas, me representa.
Como el Señor Supremo, soy la fuente de la entidad viviente, los modos de influencia de la naturaleza material; la virtud, la pasión y la ignorancia, y los elementos de la naturaleza material. Así, Yo soy TODO y nada puede existir sin Mí.
Aunque pudiera contar todos los átomos del universo durante un tiempo, no podría contar todas Mis opulencias que manifiesto en innumerables universos (galaxias).
Cualquiera que sea el poder, la belleza, la fama, la opulencia, la humildad, la renuncia, el placer mental, la fortuna, el poder, la tolerancia o el conocimiento espiritual, es simplemente una expansión de Mi opulencia.
Te he descrito brevemente todas Mis opulencias espirituales así como las extraordinarias características materiales de Mi creación, percibidas por la mente y definidas de diferentes maneras según las circunstancias.
Consejo de Krishna, Dios, la Persona Suprema.
Por lo tanto, controla tu lenguaje, controla tu mente, conquista tu aire vital, controla tus sentidos y, a través de la inteligencia purificada, controla tus facultades racionales. De esta manera, nunca más caerás en el camino de la existencia material. Un trascendentalista que no controla completamente sus palabras y su mente por una inteligencia superior, encontrará que sus votos espirituales, austeridades y caridad se filtran como el agua brota de una vasija de arcilla sin cocer.
Estando sujeto a Mí, tendrás que controlar tu discurso, tu mente, tu aire vital, y entonces por medio de la inteligencia devocional amorosa, cumplirás completamente la misión de tu existencia. Para los filósofos eruditos y autorrealizados, yo soy el único objeto de adoración, la meta deseada de la vida, el medio para llegar a esa meta y la conclusión final de todo conocimiento. En efecto, como Yo soy la causa de su felicidad y de su liberación de la infelicidad, esas almas eruditas no tienen ninguna meta efectiva ni objeto apreciado en la vida, excepto Yo.