Estos incidentes particulares están disponibles sólo para los habitantes de Vraja, como Nanda Maharaja, y no para los adoradores impersonalistas del Ser Espiritual Impersonal o del Alma Suprema. A veces, cuando los malhechores demoníacos le atacaban en el bosque, Krishna parecía estar aturdido, pero lanzaba su mirada sobre ellos como un cachorro de león y los destruía. Sus compañeros de infancia también se quedaron asombrados, y cuando volvieron a casa, no tardaron en contárselo a sus padres, y todos apreciaron las cualidades de su Krishna. El niño Krishna no sólo pertenecía a sus padres, es decir, a Nanda y Yasoda, sino que también era considerado el hijo de todos los habitantes mayores de Vrindavana, al igual que era amigo de todos los niños y niñas de su edad. Todo el mundo amaba a Krishna; Él era la vida, el alma misma de todos los seres, incluidas las vacas, los terneros y los animales del bosque. Por eso Krishna significa «El infinitamente fascinante».

El Señor sigue siendo el Señor en todas las circunstancias. Ya sea jugando como un niño en el regazo de Su madre, yasoda, o como un joven pastor con Sus sublimes amigos, Él sigue siendo Dios, sin que ninguna de Sus seis excelencias se vea disminuida. Así, Él permanece sin rival.

La mera práctica de escuchar atentamente los entretenimientos del Señor confiere innumerables beneficios.

En efecto, quien escucha, canta o disfruta de los maravillosos relatos de los entretenimientos del Señor que apareció en Su forma original y personal, emanaciones completas o Avatares, para liberar al mundo, se libera inmediatamente de las consecuencias de todas sus faltas, incluido el asesinato de un sabio. El ser santo, el perfecto espiritista, debe acoger constantemente con gran reverencia el relato de los agasajos del Señor, pues siempre tienen lugar en el plano de la trascendencia.

Todo ser vivo, y especialmente un representante de la raza humana, debe sentir gratitud hacia el Señor Supremo por las bendiciones obtenidas por Su gracia. Y cualquiera que muestre tal gratitud, con toda la sencillez de corazón, debe ser consciente de Krishna, Dios, la Persona Suprema y servirle con amor y devoción.