Dice el Señor: «Escuchad cómo, practicando yoga [la práctica de la unión y comunión con Dios], con la conciencia y la mente fijas en Mí, os será posible conocerme plenamente, sin que quede la menor duda».

El amor puro por Krishna existe desde toda la eternidad, y se encuentra en el corazón de todos los seres, y en ninguna otra parte.

Y cuando el corazón se purifica cantando «Haré Krishna» y escuchando las glorias del Señor Krishna, el ser despierta naturalmente.

Puesto que la conciencia de Krishna es inherente a cada uno de nosotros, necesitamos oír hablar de Él. Todo lo que tenemos que hacer es cantar y escuchar a Krishna, y nuestro corazón será directamente purificado y nuestra conciencia original, la conciencia de Krishna, despertará inmediatamente dentro de nosotros.

La conciencia de Krishna no puede sernos impuesta por artificio alguno, pues ya existe en nuestros respectivos corazones, y tan pronto como tarareamos el canto de los Santos Nombres de Krishna «Haré Krishna», nuestros corazones se purifican de todas las impurezas materiales.

Tan pronto como nos hacemos conscientes de Krishna, instantáneamente nos hacemos conscientes de nuestra verdadera identidad espiritual, y entonces, a través de la práctica del servicio devocional que ofrecemos al Señor, desarrollamos el conocimiento de Dios. Y cuando estamos firmemente establecidos en el servicio devocional, cuando hemos desarrollado plenamente nuestra conciencia espiritual, entonces somos capaces de percibir la presencia del Señor en cada acto que realizamos.

Esto es lo que se conoce como «liberación a través de la realización del Absoluto».

El Señor Krishna reina sobre la naturaleza material, y todas las almas condicionadas están sujetas al yugo y al rigor de las leyes de la naturaleza material.

A menos que conozcamos estas verdades fundamentales, no puede haber paz en este mundo, tanto individual como colectivamente. La paz perfecta se logra únicamente a través del pleno desarrollo de la conciencia de Krishna.

En verdad, el ser consciente de Krishna actúa siempre con pleno conocimiento de la relación que lo une al Señor Supremo, y la perfección de esta ciencia consiste en conocer perfectamente al Señor Krishna, la Persona Suprema.