Cuando han disfrutado de estos placeres celestiales, cuando sus méritos se han agotado, regresan a esta Tierra mortal. La frágil felicidad, por lo tanto, es el único fruto que cosechan después de seguir los principios de los Vedas. Pero aquellos que Me adoran con devoción, meditando en Mi forma absoluta, Yo lleno sus carencias y conservo lo que poseen. Cualquier oblación que el hombre sacrifica con fe a los seres celestiales está en realidad destinada sólo a Mí, pero ofrecida sin conocimiento.

Pues, Yo soy el único Beneficiario y el único Objeto del sacrificio. Ahora bien, aquellos que ignoran Mi naturaleza verdadera y absoluta, retroceden. Aquellos que adoran a los seres celestiales renacerán entre los seres celestiales, entre los espectros y otros espíritus aquellos que viven en su adoración, entre los antepasados los adoradores de los antepasados, de la misma manera, es Conmigo que vivirán Mis devotos.

Que uno Me ofrezca, con amor y devoción, una hoja, una flor, una fruta, un poco de agua, y esta ofrenda, Yo la aceptaré.

Hagas lo que hagas, comas lo que comas, sacrifiques y prodigues lo que prodigues, practiques la austeridad que practiques, que sea para ofrecérmelo a Mí. Así, te liberarás de las consecuencias de tus actos, todos ellos, virtuosos o culpables. Mediante este principio de renuncia, te liberarás y vendrás a Mí. Yo no envidio, no favorezco a nadie, hacia todos soy imparcial. Pero quien Me sirve con devoción vive en Mí; es amigo Mío, como Yo soy su amigo.

Aunque cometa los peores actos, cualquiera que se dedique al servicio devocional debe ser considerado un hombre santo, porque está en el camino perfecto.

Pronto se vuelve irreprochable y encuentra la paz eterna. Puedes proclamarlo en voz alta, Mi devoto nunca perecerá. Quienquiera que se refugie en Mí, aunque sea de baja cuna, una mujer, un comerciante o incluso un jornalero, puede alcanzar la meta suprema.

Qué decir entonces de los guías espirituales, los justos, los devotos y los santos reyes, que en este mundo efímero, en este mundo de sufrimiento, Me sirven con amor y devoción. Llena siempre tu mente de Mí, conviértete en Mi devoto, ofréceme tu homenaje y dedícame tu adoración. Perfectamente absorto en Mí, llegarás a Mí.

Las Glorias del Absoluto (de Dios)

Krishna, Dios, la Persona Suprema nos revela quién es Él:

Una vez más escucha Mi palabra suprema, pronunciada para tu bien, que te traerá alegría. Ni las multitudes de seres celestiales ni los grandes sabios conocen Mi origen, pues en todas las cosas Yo soy la Fuente de ambos.

Aquel que Me conoce sin nacimiento, sin principio, el Soberano de todos los mundos, él, sin ilusión entre los hombres, se libera de todo pecado.