Primordial, Original y Absoluto. Él es el No Nacido, Su propio origen y la belleza que todo lo impregna. Él es el objetivo último de la existencia, el descanso último, la morada de infinitas cualidades espirituales, el Maestro Supremo y el Hacedor Supremo. Es la bondad personificada, el bien absoluto y la fuente de toda iluminación.
El Señor Soberano es la fuente de todo conocimiento, todo poder, toda fuerza, toda opulencia y toda influencia. Sus poderes no tienen límites. Como Él es rico en todos los atributos divinos, nada abominable en el universo material puede existir en Él. Él es trascendental y espiritual, por lo que los conceptos de felicidad e infelicidad material no se aplican a Él. En realidad no hay contradicciones en Él. Por eso se le llama Supremo y Todopoderoso.
Él es la Verdad Absoluta, la verdadera realidad, la fuente de inteligencia y conocimiento. Él es el Principio Activo de todas las cosas, de todos los seres vivos, humanos, animales, vegetales, así como del átomo, sin Él todo estaría muerto.
Él es el Supremo Protector, la Suprema y Absoluta Pureza. Él es el todo completo, y ya lo sabe todo sobre todo, nada es desconocido para Él. Está presente en todas partes y conoce las necesidades de todos los seres. Él es la fuente de todo lo que existe, y nadie es independiente de Él. Nada existe fuera de Dios, y nada ni nadie está separado de la Persona Suprema.
Es omnipresente, omnisciente, omnipotente y el refugio de todos los seres. No tiene principio, porque Él mismo es el principio de todas las cosas. Es fácilmente accesible para los seres santos y sinceros.
En nuestra existencia condicionada, nuestros cuerpos están compuestos de diferentes partes, pero aunque aparentemente lo mismo ocurre con el Cuerpo de Krishna, ninguna de las partes que lo componen es diferente de otra. Krishna puede ver con Sus ojos, pero también puede ver sin Sus ojos. Puede ver con sus manos y pies. No necesita recurrir a una parte concreta de Su Cuerpo para realizar una acción determinada. Él puede hacer lo que quiera con cualquier parte de Su Cuerpo. Cada uno de los órganos de Su cuerpo espiritual posee la facultad de realizar plenamente las funciones de todos Sus otros miembros. Por eso se dice que es todopoderoso.
Sólo él dirige los sentidos. Por lo tanto, a menos que estén investidos de poder por Su energía, nuestros sentidos no pueden actuar. En otras palabras, sólo Él ve, sólo Él actúa, sólo Él escucha. Él es el único Principio Activo o Maestro Supremo. De Su Persona emanan innumerables formas. Él está dentro y fuera de todo lo que existe. La manifestación cósmica, su creación, mantenimiento y destrucción no son sino manifestaciones de Su poder. Él existe en el principio, en el medio y en el final de todo lo que es, desde la más pequeña partícula de manifestación cósmica, el átomo, hasta los gigantescos universos y la totalidad de la energía material.