impersonalistas, por rechazar todo contacto con el Señor, no obtienen un cuerpo espiritual adecuado para la acción espiritual, sino que permanecen como meras chispas espirituales, fundidas en el deslumbrante resplandor que emana del Señor Supremo.

El Señor es la forma completa de la eternidad, el conocimiento y la dicha, mientras que el resplandor sin forma es una mera manifestación de la eternidad y el conocimiento. Los Vaikunthas espirituales son también formas de eternidad, conocimiento y dicha, y los seres santos admitidos en el reino de Dios obtienen cada uno un cuerpo de eternidad, conocimiento y dicha. Así, estos diversos elementos espirituales no son distinguibles de ninguna manera; la Morada del Señor, el Nombre, el Renombre, el Entorno, etc., todos participan de la misma naturaleza espiritual y absoluta.

Generalmente se entiende que al fundirse en el aspecto impersonal de la Verdad Absoluta, Dios, uno encuentra la felicidad perfecta. Uno experimenta la felicidad espiritual al fundirse en el Ser Supremo Impersonal porque Él es el resplandor de Dios, la Persona Suprema. El Ser Supremo Impersonal está formado por los rayos que emanan del cuerpo trascendental de Krishna. En consecuencia, la dicha espiritual que uno puede experimentar al fundirse en Él proviene del contacto con Krishna. Cuando la mente está en relación con el Ser Supremo Impersonal, el ser se satisface, pero necesita progresar más para servir al Señor Supremo porque no tiene la seguridad de permanecer en el resplandor del aspecto impersonal de Dios.

Incluso si uno se sumerge en el aspecto impersonal de la Verdad Absoluta, puede caer de esa posición porque no conoce al Señor en Su forma real. Cuando uno va más allá de la realización del Ser Supremo impersonal y del Alma Suprema localizada y se vuelve hacia Dios, la Persona Suprema, en la relación de sirviente, amigo, padre o amante, entonces la felicidad espiritual impregna todo su ser. En esta etapa, uno experimenta automáticamente la dicha espiritual, al igual que uno se vuelve alegre tan pronto como ve el brillo de la luna. La luz del Ser Supremo Impersonal es una emanación de la forma suprema, real y original de Krishna, Dios, la Persona Suprema.

¿Dónde van los impersonalistas cuando mueren sus cuerpos materiales?

Dios también ayuda a los impersonalistas que desean cometer «suicidio espiritual» negando artificialmente su existencia como almas espirituales individuales (como los budistas):

Los absorbe en el resplandor que emana de Su Persona. Pero como se niegan a aceptar la Verdad Absoluta, Dios, en Su forma personal, real, eterna, original y dichosa, no pueden, una vez «perdida» su individualidad, saborear la dicha de servir al Señor con amor. Algunos incluso, sin haber alcanzado todavía la realización impersonal, vuelven a la vida material para dar expresión a su deseo latente de acción. No tienen acceso a los planetas espirituales, pero vuelven a tener la