La ciencia de Dios, o ciencia de la salvación
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El hombre rebelde hinchado de orgullo y vanidad no lo escucha. Masacra animales, destruye plantas, mata bebés en el vientre de su madre, y extrae combustibles fósiles, carbón, petróleo y gas en el origen de las perturbaciones climáticas, sin reparos, y come carne, pescado y huevos.

Este es el origen de las pandemias, del covid-19, de los virus, de las guerras, de los huracanes, de los terremotos, de las sequías, de las inundaciones, de las dificultades económicas, de las grandes enfermedades crónicas (las arterias y las venas se obstruyen, los dientes se rompen, el consumo de carne roja promueve enfermedades coronarias, cáncer colorrectal, enfermedades cardiovasculares, y aumenta el riesgo de obesidad o diabetes tipo 2, etc.), etc., todo esto no pasa, no va a parar, mientras la gente siga para hacerlo

Así que dejemos de sacrificar animales en mataderos, en mar abierto y en centros de pesca y acuicultura, dejemos de destruir plantas incluyendo árboles, dejemos de abortar, extraer y vender carbón, petróleo y gas, y dejemos de comer carne, pescado y huevos.

También para poner fin a todos estos flagelos y hacer desaparecer definitivamente todos los sufrimientos que asaltan al hombre, basta abandonarse completamente a Dios, amarlo, obedecerlo, hacer su voluntad y servir con amor. y devoción. Verás, todo desaparecerá.

¿Quién es Dios, la Persona Suprema y Soberana?

Dios, Persona Suprema y Soberana, en su forma Personal, Primordial, Original, Infinita y Absoluta, es llamado también la Verdad Absoluta, porque basta conocerlo como realmente es, conocerlo todo a la vez desde la verdad. existencial

Él es Luz Pura Trascendente, Existencia Absoluta, Conciencia Absoluta, Bienaventuranza Absoluta, Morada Suprema, Purificador Soberano, Belleza Absoluta y Omnipresente y Vida Eterna.

Es la Fuente Original de todas las Emanaciones Plenarias de su Divina Persona, también llamadas Avatares.

Nada existe fuera de Él. Toda la manifestación cósmica reposa en Él, ni ella ni los seres están separados de su Divina Persona. Todos los seres son pequeños fragmentos de su Persona, son parte integral de él, le pertenecen. Antes de la creación, Él ya existía.

Él es la semilla, es decir el principio fundamental de este mundo de entidades móviles e inmóviles. Él es la sustancia de la materia, la causa material y la causa espiritual eficiente. El universo entero, por una simple chispa de su Persona, lo penetra y lo sustenta.

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